Uno de los campos de la odontología que está experimentando un mayor crecimiento en los últimos años es el de la estética dental. Empieza a calar en la población la importancia que tiene para la imagen que proyectamos, una sonrisa limpia y equilibrada.
Sin embargo, no debemos olvidar que cerca de una de cada tres personas sufre halitosis, un problema de mal aliento que se caracteriza por la presencia de olores desagradables que se emiten por la boca.
A nivel social, puede llegar a provocar grandes trastornos, rechazo e incluso problemas laborales. Por todo ello es fundamental enfrentarse al problema y resolverlo de la mano de profesionales con experiencia como los de la Clínica Dental María Gómez Palacios de Cartaya (Huelva).
Índice de contenidos
En la época que vivimos de sobreinformación y abundancia de remedios muy poco contrastados, podrás encontrar cientos de recetas para el mal aliento, pero tenemos que advertirte que es muy peligroso recorrer ese camino.
Si estás experimentando un problema de halitosis, lo que debes hacer es acudir a tu médico para que identifique sus causas y te ofrezca un plan de acción en forma de tratamiento.
Tipos de Halitosis
Llegados a este punto debemos aclarar que existen dos tipos de halitosis:
- Transitoria: es puntual y suele darse nada más despertar. La provocan la reducción de la salivación y el largo periodo sin comer. Algunos alimentos como el ajo o la cebolla pueden ser fuertes desencadenantes de episodios transitorios.
- Persistente: no logra solucionarse con métodos de higiene tradicionales, y necesitan ser diagnosticados para poner en marcha un tratamiento específico. Además, esta variante puede tener origen dentro de la boca o fuera de ella.
Existen múltiples configuraciones para tratamientos contra la halitosis y además están fuertemente ligados a las condiciones personales de cada paciente, por lo que es necesario que sea un profesional sanitario el que te lo prescriba.
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No obstante, existen una serie de recomendaciones que podemos tener en cuenta para prevenir la halitosis e incluso eliminarla cuando se trata de episodios leves. Vamos a verlos.
1. Buena higiene bucodental
Fundamental para prevenir el mal aliento. Debes cepillarte tras cada comida, utilizar un enjuague bucal y aplicar hilo dental periódicamente.
Con esta combinación podrás eliminar muchas de las bacterias a las que no se puede acceder con el cepillo de dientes.
2. Producción de saliva óptima
Quizás no lo sepas, pero una de las vías para prevenir la halitosis es eliminar las prácticas que reducen la producción de la saliva. Incentivar la producción de saliva es positivo para el buen aliento.
Respira por la nariz, mastica muy bien los alimentos antes de tragarlos, bebe agua con frecuencia, aumenta la ingesta de cítricos y alimentos ricos en fibra, y si quieres, mastica chicles sin azúcar.
3. Alta hidratación
El alcohol es un deshidratante que al entrar en contacto con la saliva y las mucosas de la boca favorece la volatilización de compuestos que huelen mal.
Debes mantenerte hidratado bebiendo agua o cualquier otro líquido sin alcohol como las infusiones. Lo recomendable es que bebas un litro y medio de agua al día.
4. Dieta equilibrada
La ingesta regular de cantidad de verduras frescas y ricas en fibra, como las zanahorias o el brócoli, son ejemplos de una alimentación sana y equilibrada.
Este tipo de vegetales no sólo son cómplices de una vida saludable, sino que te ayudan a limpiar tus dientes. Trata de no mezclar almidones (patata, pan, pasta, …) con proteínas y, de postre, elige mejor la fruta asada.
Además, no espaciar las comidas más de 4 horas también ayuda.
5. Alimentos a evitar
Existen ciertos alimentos que producen digestiones muy pesadas. Podemos citar los embutidos, los dulces o la carne de ternera; todos ellos propensos a causar halitosis.
Pero aún así, no es necesario que los elimines completamente de tu dieta. Como en muchos otros casos se trata de moderar su ingesta y ser conscientes de aplicar medidas correctoras de higiene poco tiempo después de ingerirlos, para que su efecto se acorte lo máximo posible.
6. Consulta a tu médico
Como decíamos al principio, por mucha prevención que tengamos, el problema de halitosis puede venir provocado por otra patología temporal como puede ser una faringitis o una amigdalitis.
Si estamos en uno de esos casos, no tienes de qué preocuparte, puesto que la halitosis se marchará en cuanto desaparezca la enfermedad que la causó.
Sin embargo, no siempre es así, y las patologías que producen el mal aliento son algo más graves. Normalmente se tratan de trastornos en el sistema digestivo, a saber, gastritis, úlceras o reflujo gastroesofágico.
La periodicidad en la aparición de la halitosis puede estar indicando que estamos ante un problema que no se va a resolver con una mejora de nuestros hábitos, sino que es necesario acudir lo antes posible a un médico.
Es posible que la halitosis haya sido hasta una buena noticia para identificar otro problema más grave. Con frecuencia el problema del mal aliento, desaparece o mejora con la cura de estas patologías asociadas.
7. Visitar al dentista
Las visitas regulares a tu dentista resultan ser claves para acabar con los problemas de mal aliento.
En la clínica dental María Gómez Palacios de Cartaya (Huelva) tenemos odontólogos con dilatada experiencia tratando trastornos de mal aliento. Nuestros odontólogos realizarán una exploración bucal para detectar la presencia de posibles caries o fracturas que podrían estar detrás del episodio de halitosis.
Además, nuestros facultativos podrán descubrir si existen otras causas de origen periodontal como podría ser placa bacteriana, sarro o bolsas periodontales.
Como ves, son múltiples las causas que podrían estar causando tus problemas de mal aliento y que están en manos de tu dentista resolver de forma sencilla y poco intrusiva.
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Conclusiones
Apenas hemos raspado la superficie de un problema muy común en nuestra sociedad, que no siempre preocupa a quienes lo padecen pero que influyen de manera decisiva en cómo los demás nos perciben.
Si tuviéramos que dejar una recomendación diríamos que cuando se trata de episodios leves o infrecuentes, con un cambio en nuestro estilo de vida podría ser suficiente para prevenir sus efectos.
Si los problemas de halitosis están presentes de forma recurrente y no somos especialmente pulcros con nuestra higiene bucodental, es completamente necesario acudir a un dentista porque es muy probable que se traten de patologías leves intraorales.
Pero si sufrimos episodios fuertes de mal aliento, frecuentes y solemos llevar una higiene bucodental ordenada, estamos ante un claro caso de problema extraoral y es muy importante acudir a tu médico.
Como en cada ocasión, en la Clínica Dental María Gómez Palacios de Cartaya (Huelva), estamos a tu disposición para todas aquellas consultas que necesites realizarnos. Pide cita y hablamos.
Recuerda que una visita periódica al dentista puede ahorrarte muchas sorpresas desagradables.
Odontóloga. Licenciada por la Universidad de Sevilla. 20 años de experiencia. Odontología General y especializada en Ortodoncia.
Directora de la Clínica.
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