El cambio de coloración en las encías es una pregunta muy recurrente entre las personas que visitan la Clínica Dental María Gómez Palacios de Cartaya. Afortunadamente para nuestros pacientes muchos de esos casos son consecuencia de malos hábitos en cuanto a la higiene bucodental.
Por eso, en la mayor parte de los casos lo que se provoca es una gingivitis.
La gingivitis es una enfermedad que se produce por la acumulación de placa bacteriana. Si no se elimina correctamente, se transforma en sarro que irrita e inflama las encías.
Es una enfermedad perfectamente tratable con diversos tratamientos de limpieza dental. Y en cuanto a posibles lesiones de los tejidos, nuestros especialistas sabrán reconducir la situación.
Sin embargo, en muchas más ocasiones de las deseables, las causas son otras. Por eso es necesario conocer los distintos escenarios y actuar en consecuencia.
Pero antes de estudiar las causas y cómo tratarlas, vamos a establecer un marco de referencia sobre las encías, porque no todas las personas tienen claro de qué hablamos.
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Conociendo las encías
Las encías son el tejido blando que protege los dientes y es unos de los tejidos que forman la parte periodontal del diente, junto con el hueso y el ligamento periodontal.
Periodontal significa “alrededor del diente”.
La encía protectora es la encía queratinizada, es la que está alrededor del diente e íntimamente adherida a la superficie dental.
La encía no queratinizada suele estar más alejada del diente pues es la continuación de la encía queratinizada. Es más flexible y móvil y no ejerce la función protectora de la anterior.
Veamos ahora con detalle las alteraciones que pueden darse en las encías, sobre todo en lo que tiene que ver con su coloración.
Coloración de las encías
El color de las encías puede verse alternado en muchas ocasiones por muy diversas causas.
Repasemos aquellas que son más frecuentes.
- Rojo intenso: frecuentemente relacionado con una gingivitis bacteriana con abundante sangrado.
- Cambio de color en papilas de color negro y blanquecino: está relacionado con un gingivitis ulcero necrótica que provoca dolor intenso y sangrado. Podría estar relacionado con una úlcera o afta causada por un roce de un diente o una prótesis dental. Otra posible causa podría ser un liquen plano, que es una enfermedad autoinmune que provoca la aparición de manchas blancas en forma de red, en diversas partes de la boca. El tabaco también es la causa de emblanquecimiento de las encías.
- Manchas oscuras en la encía: en este caso el tabaco una vez más puede ser el causante de dicha situación. Otra causa relativamente habitual es la melanosis gingival, que es el oscurecimiento de las encías por un aumento de la actividad de la melanina, responsable de oscurecer nuestra piel. Esta situación es más habitual en personas de piel morena.
Tratamientos para los cambios de coloración de las encías
Atendiendo a las patologías presentes en los cambios de coloración de las encías podemos hacernos una idea de los tratamientos que podemos aplicar.
Empezando por la gingivitis, el tratamiento más habitual es la limpieza profesional de las encías, acompañada en ocasiones de colutorios de clorhexidina y/o antibióticos.
En los casos de gingivitis con úlceras, normalmente se propone un tratamiento inicial de antibióticos y colutorios (ya que es muy dolorosa e impediría una limpieza profesional inicial) y posteriormente una limpieza.
En caso de aftas, lo primero es conocer la causa y si hubiera, eliminarla o tratarla, como pudieran ser roces relacionados con prótesis o restauraciones dentales. Después de esto podríamos aplicar colutorios o geles eficaces en el curado de las mismas, como son aquellos que llevan ácido hialurónico.
En caso de liquen plano, y en particular del liquen plano blanco, al ser asintomático no hay que hacer ningún tratamiento. Sí que es recomendable realizar un seguimiento por si hay cambios en los tejidos.
Respecto a la melanosis gingival el único tratamiento es la gingivectomia de la zona oscurecida, es decir, eliminar la zona afectada, aunque hay altas probabilidades de que vuelva a aparecer.
Respecto a los efectos en el color de las encías a causa del tabaco, no hay mucha más solución que eliminar el hábito que causa el efecto indeseado. O dicho de otra forma, dejar de fumar.
Prevención
Como siempre decimos cuando tratamos patologías bucodentales, no hay mejor prevención que los hábitos de higiene saludables: rutina de cepillado al menos dos veces al día, uso de hilo dental con frecuencia, y opcionalmente un enjuague bucal para evitar que las bacterias que causan el mal olor se apoderen de tu boca, y de tus encías.
Una vez más esperamos haber resuelto tus dudas, quedamos a tu disposición en nuestra consulta dental en Cartaya, y os emplazamos para la próxima ocasión.
¡Saludos!
Odontóloga. Licenciada por la Universidad de Sevilla. 20 años de experiencia. Odontología General y especializada en Ortodoncia.
Directora de la Clínica.